Violín

Leyendo honestly...WTF que es un blog que descubrí gracias a galletas de ante me acorde de lo mucho que me gusta el violín. Hoy Erica escribía un post sobre un luthier afincado en Brookling llamado Sam Zygmuntowisc y que hace violines para músicos de las grandes ligas. Yo no se explicar muy bien mi amor por este instrumento, nunca me llevaron a clases pero creo que tiene mucho que ver con la gran afición de mi padre a la música clásica y la huella que dejo en mi la pelí The red violin. Cuando llegué a vivir a Barcelona hace casi 10 años me propuse aprender a tocar este maravilloso instrumento y mi madre por navidad me regaló aquel año uno para que pudiera comenzar. Me apunte a clases particulares, tenía una profesora mexicana maravillosa que me tenía mucha paciencia porque aprender a tocar un instrumento con 25 años no es nada fácil, nunca logré que sonara dulcemente pero fue una gran experiencia y respeto mucho a quién logra sacar los sonidos más dulces porque no es nada fácil. Al mudarme a Madrid lo abandone por completo, el violín sigue esperando pacientemente a que me anime de nuevo a intentar tocarlo por ahora me quedo con disfrutar de los grandes músicos que ya logran dominar al instrumento. Les comparto el maravilloso video de Dustin Cohen, the violin maker, donde Sam Zygmuntowisc es el protagonista y que me ha encantado.

The Violin Maker from Dustin Cohen on Vimeo.